Jesús María: Vecinos pidieron justicia por el abuso sexual a una mujer con discapacidad

Luego de una reunión con las autoridades policiales, marcharon hasta la casa del presunto autor de este aberrante hecho. La víctima tiene 43 años y padece un retraso mental moderado. El acusado y detenido tiene 18 años y está imputado de "abuso sexual simple".

Los vecinos de barrio Norte realizaron una marcha pidiendo justicia por un aberrante episodio que trascendió el fin de semana y que tiene como víctima a una mujer de 43 años que padece una discapacidad mental.
Todo habría ocurrido el pasado sábado en horas de la noche, cuando un joven de 18 años habría abordado a la víctima, que llegó llorando a su casa.
Su familia de inmediato concurrió a la Comisaría y realizó la denuncia, lo que derivó en una derivación a la Unidad Judicial de la Mujer y el Niño, donde se practicaron pericias más específicas para determinar el tipo de abuso.
La Justicia tomó la determinación de detener de inmediato al presunto autor del hecho, un joven de 18 años que vive a escasos metros de la vivienda de la víctima.
Este miércoles por la noche los vecinos del sector y la familia de la mujer ultrajada se reunieron con autoridades policiales y pidieron explicaciones. "No queremos que este tipo vuelva al barrio, es un violador", esgrimió una vecina totalmente desesperada ante esta situación.
Todos los presentes señalaron al detenido como un joven problemático que tendría cientos de "entradas" a la Policía por distintas causas, muchas con origen en el propio barrio.
El Crio My José Mansilla explicó que el Fiscal Guillermo Monti está trabajando puntillosamente en el caso y aseguró que el imputado no saldrá en libertad mientras se desarrolle la investigación.
Además del episodio puntual, los presentes cuestionaron un "certificado de discapacidad" que tiene el adolescente y temen que por este motivo lo declaren inimputable.
Sobre este punto Mansilla explicó que restan algunas pericias pero advirtió que aunque el detenido tenga cierta discapacidad, esto no quiere decir que no haya comprendido la gravedad del hecho presuntamente cometido. Con esto intentó llevar tranquilidad a los vecinos y sostuvo que si no espera el proceso en la cárcel, lo hará en un instituto especializado en este tipo de casos.
Luego de la reunión en la que participaron más de 150 vecinos, todos marcharon hasta la casa del presunto abusador al grito de "¡justicia!".
La víctima es muy querida en el barrio y todos temen por la enorme cantidad de niños y niñas muy pequeños que hay en el sector.