El padecimiento de la mamá de un joven con síndrome de down por la falta de colectivos en General Paz

Mabel Delgado nos contó lo que tuvo que vivir con su hijo de 16 años, que debe realizarse distintas terapias que son fundamentales para su salud. Debe hacer varios kilómetros para poder tomar un coche y muchas veces pasa horas varada a la vera de Ruta 9 Norte. 

Mabel Delgado es una vecina más de Estación General Paz, un pueblo que quedó aislado después de que se habilitó la variante que rodea la localidad. Desde entonces gran parte de los colectivos que conectan con la Capital y el Norte provincial no ingresan a la zona urbana. 
Esto obliga a muchos de los que deben viajar para realizar distintas actividades a movilizarse varios kilómetros a las afueras del pueblo para poder esperar el colectivo en una parada a la vera de Ruta 9 Norte. 
Mabel debe hacer eso como mínimo dos veces por semana junto a su hijo Jeremías, que tiene síndrome de down y debe viajar a Villa del Totoral para recibir distintas terapias que son fundamentales para su salud. 
El martes ella se quedó esperando en la parada ubicada frente a la planta de Bünge, a varios kilómetros de General Paz, y ningún colectivo paró para levantarla. Un familiar tuvo trasladarlos en un auto particular. 
Mabel intentó realizar el reclamo pertinente en las oficinas del ERSeP de la Terminal de Jesús María pero no tuvo eco. 
Los vecinos del sector siguen peleando para recuperar el transporte público, que para un pueblo que es "satélite" se convierte en una cuestión fundamental. Hasta el momento las autoridades locales y provinciales no brindaron ningún tipo de respuesta.
"Nos dejaron a la deriva, el Fono Bus y el Ersa que va a Totoral, no nos levantan", contó Mabel. 
Las protestas, las reuniones y la junta de firmas no hicieron mella en los políticos de turno, ninguno de ellos, porsupuesto, viaja en colectivo. 
 "Me puse a llorar de indignación porque no voy a pasear, voy a las terapias de mi hijo", finalizó la mujer.